El calor ya se empieza a notar en la capital y las ganas de darse un chapuzón aumentan por momentos. Por eso, os traemos un listado de algunas piscinas naturales a las que se puede ir con los pequeños a pasar un buen día y disfrutar de estos primeros días de intenso calor.

La isla de Rascafría

Situada en el río Lozoya, es una piscina natural donde no solo podréis daros un chapuzón sino que es ideal para hacer todo tipo de deportes acuáticos como el piragüismo. Muy cerca de la piscina hay bonitos senderos donde poder disfrutar de la naturaleza además de restaurantes típicos de la sierra madrileña.

No podemos olvidarnos de sus bonitas cascadas que conectan unas con otras y que pueden usarse para recibir un agradable masaje en la espalda y el cuello.

Embalse de Picadas

Muy cerca del Pantano de San Juan se encuentra este embalse bañado por el río Alberche. Una zona ideal para comer y pasar un buen día en familia. Cerca del área de La Depuradora hay mesas y contenedores disponibles para un buen picnic aunque si preferís comer en un restaurante también hay varios por la zona.

Piscina Las Berceas

En Cercedilla se encuentra esta conocida piscina, que en realidad son pequeñas pozas ubicadas en el transcurso del Arroyo de la Venta. Se encuentra en el área recreativa de Las Dehesas, junto a los restos de la Calzada Romana.

Cuenta con aseos públicos, vestuarios, bar y enfermería además de merenderos y la el parque temático de aventura Aventura-Amazonia con grandes árboles, tirolinas, puentes de cuerdas…

Piscina de Riosequillo

Ubicada en Buitrago de Lozoya, encontramos una de las piscinas naturales más grandes de todo Madrid. El agua llega directamente del Embalse de Riosequillo. Tiene cerca de 4.500 metros cuadrados y a pesar de que su agua está tratada con cloro sigue están igual de fría que la del río.

El complejo dispone de zonas de descanso, merendero, baños, vestuarios, chiringuito, pistas de deporte… En este caso, habrá que esperar un par de semanas a que abra, pero ya la puedes apuntar en tu lista de lugares a los que hay que ir.

Cascadas del Hervidero

Para terminar, os proponemos la visita a las impresionantes Cascadas del Hervidero, en San Agustín del Guadalix. Un enclave mágico y único. En este caso, la escapada es ideal para niños un poco más mayores ya que el acceso se realiza a través de una escalera rocosa.

El chapuzón es ideal compaginado con una visita al pueblo de San Agustín de Guadalix. Un paseo rodeado de pozas naturales y bonitos árboles como enebros, álamos o chopos.